
Es una idea perfecta llevar a cabo un control ordinario de su coche para confirmar que esté en estado mecánico óptimo y todos los líquidos se hayan repuesto, pero si estás frente a la perspectiva de la conducción en condiciones de bruma, una verificación adicional es una buena idea.
Asegúrese de que todos los faros funcionan – en particular sus luces xenon antineblina delanteras y traseras. Estos apenas se utilizan, así que es fácil pasar por alto que una ampolleta seat xenon se ha fundido. Examine sus limpiaparabrisas también: usted quiere asegurarse de que la neblina sea la sola cuestión que tiene que enfrentar. Rasgadas o incluso rotas limpiaparabrisas serán menos eficaces, lo que puede provocar problemas con observación de la carretera. Asegúrese de que su suministro de aire para la brisera funciona bien y que sabe cómo manejarlo a la máxima comodidad. Muchos coches de esta época tienen un solo botón (a menudo una imagen de un parabrisas descrita ‘max’) que dirige el suministro de aire hacia la pantalla ancha con potencia máxima.

La mala visibilidad puede ser un factor sustancial en los siniestros automovilísticos, por lo que hay que tener esto en cuenta y conducir despacio hacia la derecha de la calle. La Oficina de Meteorología define niebla densa ‘como una limitación de la visibilidad a menos de 50 metros’, y el automóvil requiere una media de 55 metros para pararse cuando se viaja a 70 kilómetros por hora. Asegúrese de dejar un espacio más grande de lo habitual entre usted y el conductor delante. Autor